Un animal es un ser viviente de quien se debe ocupar a lo largo de su vida. Es por eso que hay que hacerse las preguntas correctas antes de lanzarse a buscar una mascota para un niño:
- ¿Cuál es la esperanza de vida del compañero escogido?
- ¿Cuánto tiempo de cuidados tiene que dedicarle?
- Tiene el presupuesto necesario (¿veterinario, alimento, tratamiento antipulgas, vermicida)?
- ¿Qué haremos del animal cuando nos marchemos de vacaciones o en fin de semana?
- ¿Todos los miembros de la familia están dispuestos a acogerlo?
- ¿Acaso un miembro de la familia es alérgico?
No olvide que las promesas de un niño duran sólo un tiempo... En general los padres acaban por encargarse de los cuidados más importantes de la mascota, como sacar el perro bajo la lluvia, vaciar la litera, limpiar la jaula o darle de comer. Habrá pues que hacerle saber a su niño que su animal de compañía no es un juguete, que debe ocuparse de eso y educarle.
El gato
El gato es el animal de compañía más presente en nuestros hogares. En general, el gato se entiende perfectamente con los niños, le gusta divertirse con ellos y hacerse acariciar. Su mantenimiento, además, es menos sacrificado que el de un perro. En cambio, el niño es dependiente del buen humor del animal. Él no puede forzar a un gato a jugar o acariciarle si no tiene ganas de eso.
El perro
Cuando comparte su vida con un perro, sobre todo en el período de la infancia, la memoria es impregnada de forma duradera por su compañía. Atención, sin embargo, porque adoptar un perro representa una verdadera coacción que hay que medir bien antes de lanzarse a comprar un mascota. Si usted no puede sacarlo a pasear al menos una vez al día, por ejemplo, vale evitarlo. También, un perro grande no estará muy feliz en un pequeño piso. Concerniendo a la raza, infórmese previamente cerca de sus cuidados con un profesional veterinario. Y no dude, en caso de dificultades, en pedirles un consejo a los educadores o adiestradores caninos.
Tierno y afectuoso es un animal que "habla" mucho. Ideal cualquiera sea el carácter del niño. El conejillo de Indias es un animal que le gusta ser acariciado y abrazado. No obstante puede ser bastante miedoso y domesticarlo requiere de tiempo y paciencia. Al conejillo de Indias no le gusta la soledad, si él vive sólo necesitará atenciones y estar cerca de los humanos. Es una muy buena elección para un niño a partir de 4 años, a condición de que los padres no le dejen manipular al animal sin vigilancia: las fracturas son bastante frecuentes.
Muy dulce, parecería que él puede apaciguar a los niños más turbulentos. Le gusta acurrucarse en los brazos. Afectuoso, inteligente, curioso y muy sociable, el conejo enano es un compañero ideal para los niños a partir de 4 años.
¡Muy activo, al hámster le gusta escalar, correr y hacer volteretas! Mirarlo en vivo es un verdadero espectáculo, pero poco manipulable. Atención también tiene mucha actividad por la noche. Evite entonces ponerlo en la habitación del niño. Los niños se cansan bastante rápidamente de este animal solitario, que no busca el contacto forzosamente.
La rata domestica
Enérgico, vivaz, inteligente, el ratón domestico es un pequeño animal muy apreciado por los niños. Su actividad diurna lo hace un compañero interesante y comunicativo para un niño.
A pesar de la repugnancia que generalmente inspira en adultos este animalito en nuestras casas, se trata de es un pequeño animal muy agradable, inteligente y sociable. También es muy cariñoso pero algo frágil y de delicado manejo. Por lo que la rata doméstica se aconseja para los niños mayores y adolescentes.
No se vea influido por la moda de estos nuevos animales de compañía. Este animal es más bien para adultos y adolescentes, dado su carácter independiente. Mas informacion: ¿como cuidar un huron?.
El pez
El acuario propiamente dicho está esencialmente destinado a los adultos o a los adolescentes. Los pequeños acuarios o peceras con uno o dos peces pueden convenir a todos los niños, cualquiera que sea su edad.
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